miércoles, 1 de junio de 2011

El pueblo de los malditos

El pueblo de los malditos / Village of the damned (6,25)

  • Director y año: John Carpenter, 1995
  • Lo mejor: Como siempre (o casi) la música. Escenas puntuales que te erizan los pelos.
  • Lo peor: Decisiones de cambio en el argumento respecto al film del que hace remake.

Las comparaciones son odiosas (sobretodo cuando pierdo yo), y por desgracia en esta comparación de Rilla con Carpenter, el último sale perdiendo (y mira que me gusta este cineasta...).

El principio de Rilla es más curioso que terrorífico, pero con eso nos basta para seguir el desarrollo y meternos de pleno. Carpenter consigue dar algo más de miedo, pero realiza un cambio en cuanto al material original optando por la espectacularidad; en una escena choca un camión con un depósito y hace combustión instantánea, mal vamos, porque el bajo presupuesto no me vale para una realización tan pobre.

Ambas siguen aproximadamente el mismo desarrollo y Carpenter logra algunos momentos realmente buenos metiendo miedo de verdad, con algunas imágenes que nos quedarán grabadas en la memoria para siempre (gracias de nuevo a su música), haciendo su película muy reconocible.
Rilla no se queda atrás y el blanco y negro también le alcanza para atemorizarnos y meternos muy dentro de su trama, algo que consigue a través de una ambientación excelente.

Pero Carpenter vuelve a realizar un cambio en cuanto al original. Mientras en la primera todos los niños se mantienen unidos en bloque, Carpenter en la suya hace que uno de ellos se separe del resto mostrándolo humano, algo que supongo haría para aumentar la tensión, el apego hacia ese personaje y cambiar el sentido final de la película. Pero al mismo tiempo la hace tremendamente predecible, y de esa forma pierde tensión, terror y ritmo.

Rilla mantiene la cohesión del grupo, haciendo más duro su mensaje y no dando tregua a ninguno de los infantes, y creo que eso es lo que la acerca a obra maestra mientras que a la otra la aleja (aunque en ningún momento estuvo cerca, claro).

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